El Convento Canónigas de San Agustín, conocido como el Convento de las Agustinas y como Las Monjas de la sangre, está situado en la calle Monjas, en el barrio de la Vila Vella. Justo en el centro de Alicante.
El edificio empezó a construirse en 1725. Inicialmente funcionó como El Real Colegio de la Compañía de Jesús, donde residían los Jesuitas e impartían enseñanzas de secundaria. Fueron los mismos Jesuitas quienes desde 1648 tenían el deseo de construir el colegio, sin embargo, fue hasta 1724 que obtuvieron los beneficios económicos para levantar el lugar. El diseño ornamental inicial estuvo guiado por Juan Bautista Borja.
En 1732 la fachada oeste y casi la mitad del edificio fue ejecutado. Por tanto, se paró la construcción del edificio por falta de fondos. Luego en 1767 el rey Carlos III ordenó la expulsión de los Jesuitas.
Ahora bien, las monjas de la Orden de San Agustín habitaban en el Convento de la Preciosísima Sangre de Cristo, situado en la misma calle de la iglesia de los Jesuitas. Luego de la expulsión de los Jesuitas, en 1785 fue ocupado precisamente por las canónigas de San Agustín, quienes le hicieron reformas al lugar para adaptarlo a sus necesidades. Fue hasta el año 1800 que la capilla fue construida en su totalidad.
Durante la Guerra de la Independencia, en el convento se alojaron religiosas del Monasterio de la Santa Verónica, y en 1873 debido a los bombardeos de los insurrectos de Cartagena, el edificio funcionó como hospital de sangre para tropas y ciudadanos.
El edificio cuenta con grandes dimensiones y es visualmente imponente por su estructura plana, ventanas enrejadas, estilo moderno contemporáneo y fachadas sobrias. El edificio nunca terminó de construirse en su totalidad. Solo se culminó la construcción de una de sus alas, que es la paralela a la calle San Agustín. La iglesia se encuentra del lado este de la edificación y posee entrada independiente al convento.
El convento de las Canónigas de San Agustín es un convento de clausura, por lo que no es posible hacer visita o turismo en él.
En el interior de la Capilla dedicada a La Purísima Sangre de Cristo se encuentra una imagen de la Virgen de la Soledad del siglo XVI-XVII, la cual es considerada como una de las imágenes más antiguas que procesionan en la Semana Santa de Alicante. A esta capilla si se permite el ingreso de feligreses, únicamente a las 18:00 hrs para el rezo del Rosario.
La imagen de la Virgen también tiene su historia. En 1931, después de la proclamación de la Segunda República Española, se produjo una gran rebelión por parte de grupos violentos que incluía la quema de conventos e iglesias. Y el Convento de las Agustinas sufrió tales hechos y quemas, lo que ocasionó daños materiales en la capilla de la Preciosísima Sangre de Cristo, momento en el cual la imagen de la Virgen de La Soledad también fue afectada. Después de finalizada la guerra, La Virgen de La Soledad fue reconstruida.
Antes y después de eso, los enfermos creían que con tan solo tocarla o hacer contacto con el rosario de la Virgen que cuelga se iban a curar de cualquier enfermedad. De ahí que también la llamaran la Virgen de la Soledad y Nuestra Señora de La Marinera.
Como veis, es un lugar con historia y que vale la pena conocer. Aunque no se puede hacer turismo en él ni adentrarse en sus instalaciones, vale la pena echar un vistazo y caminar por sus alrededores.